DIAGNÓSTICO DE LA SITUACIÓN DE LAS OLLAS COMUNES POST PANDEMIA

INTRODUCCIÓN

Las ollas comunes surgen en el año 2020, durante la pandemia del COVID-19, cuando la población con trabajos eventuales y sobreexplotada deja de percibir ingresos debido al encierro obligatorio para protegerse del contagio. En estas circunstancias, se vieron en la necesidad de organizarse entre vecinas y retomar el trabajo comunitario para conseguir los insumos y preparar el menú diario para las familias. Inicialmente, compartieron lo que cada una tenía en su casa: una aportaba cebolla, otra arroz, etc.; es decir, unieron esfuerzos para poder alimentar a las familias, satisfaciendo así una necesidad básica y fundamental, así como un derecho humano inalienable.

Este esfuerzo de articulación y generación de esfuerzos, relaciones y acciones comunes para enfrentar el problema del hambre y la desnutrición llegó a un momento de formación y consolidación de las ollas comunes en asentamientos humanos y barrios populares. Se vieron entonces en la necesidad y en condiciones de apelar al Estado por una atención de emergencia, lo cual dio sus frutos con la promulgación del Decreto Legislativo N° 1472, para ser atendidos por Qali Warma y no ser socorridos únicamente por la ayuda humanitaria y privada.

Posteriormente, alcanzaron la Ley N° 31458, que reconoce a las ollas comunes y garantiza su sostenibilidad y financiamiento.

En los años posteriores al COVID-19, cuando se fueron paliando sus efectos mortales y dañinos para la vida y la salud de la población, la economía del país restableció su dinámica regular en fábricas, mercados y servicios. Las familias volvieron a sus negocios y trabajos en calles, mercados y paraderos. Con el tiempo que estos trabajos demandan, desde trasladarse de sus barrios a sus centros laborales y las horas largas y extenuantes de trabajo, un número considerable de familias dejó de depender de las ollas para alimentar a sus familias.

La continuidad de las ollas radica en que esta organización es la única que permite la alimentación de familias en pobreza extrema y vulnerables. También las ollas ayudan a los casos sociales de los barrios donde funcionan. La población vulnerable atendida por las ollas comprende ancianos, niños, adultos mayores, madres viudas, solteras y niños huérfanos.

Se pueden señalar 3 momentos de las ollas comunes:

Durante 2020: Surgen y funcionan gracias a donaciones privadas y entre las propias vecinas. En octubre llega el apoyo del gobierno, pero era insuficiente debido a que el SISFOH estaba desactualizado. Ese año la pobreza monetaria llegó al 30.1% de la población del país. El diálogo con el MIDIS posibilitó que, pese a no tener reconocimiento legal, las ollas recibieran presupuesto del Estado.

Inicio de 2021: Las ollas viven la apertura económica y el fin del confinamiento obligatorio. Algunas ollas cerraron, otras se fusionaron; la población vuelve a insertarse en la economía informal y va dejando el trabajo social. MIDIS implementa Canasta Perú e identifica 2,177 ollas comunes en Lima que atendían a 155,887 personas. Este año las ollas luchan porque se declare la emergencia alimentaria para destinar recursos específicos para las ollas comunes. Se aprueba la ley, pero los resultados prácticos no fueron los esperados.

A partir de 2022: Se da una tercera etapa del desarrollo de las ollas comunes. Dada la crisis, el precio del menú sube de 2 a 2.50 soles. Empiezan a recibir alimentos del MIDIS a través de Qali Warma. En 2022 y 2023, el Gobierno aportó S/. 3.70 por ración por día.

Para el año 2024, el MIDIS disminuyó el presupuesto destinado a la alimentación en las ollas comunes a S/. 2.20 soles.

Para el presente año, las ollas comunes se han incorporado al PCA y, al equiparar su presupuesto al de los comedores populares, significa una pérdida mayor de presupuesto real que pasó a ser de S/. 1.69 soles.

1. ALGUNAS CARACTERÍSTICAS SOCIOECONÓMICAS DE LOS COMENSALES DE LAS OLLAS COMUNES

De un estudio reciente de 2024, tomando una muestra del total de socios y beneficiarios, se encontraron los siguientes resultados: 91% son mujeres y el 9% varones. Estos datos muestran el papel y rol de la mujer en el hogar y el barrio.

Según categorización por edad, el mayor porcentaje de beneficiarios son los adultos cuyas edades fluctúan entre 27 y 59 años (41%), siguen los niños de 6 a 12 años con el 18%, el tercer grupo en importancia son los adolescentes de 13 a 17 años con el 13%, los adultos mayores representan el 11%, los jóvenes de 18 a 26 años representan el 10% y, finalmente, los infantes de 0 a 5 años representan el 7% como el menor grupo poblacional beneficiario.

Los grupos demográficos atendidos por las ollas son los siguientes: el 43% de los comensales son convivientes, 34% solteras/os y el 23% casados. Por ejemplo, para el 2023, del universo de comensales, solo el 11% estaba en condición de empleada/o, 11.4% con trabajo independiente (comercio ambulatorio, etc.), 14.3% con trabajo ocasional (pintores, carpinteros, etc.), 14.3% amas de casa, el 48.6% sin trabajo, sumados los hijos de estas familias, ancianos y enfermos.

En cuanto a los ingresos familiares, no han mejorado sustancialmente en los últimos años. Los que perciben el sueldo mínimo vital de S/. 1,030 sobreviven en sus hogares. Los desempleados, subempleados y casos sociales viven lo peor para sobrevivir.

En cuanto al nivel educativo de los beneficiarios de las ollas comunes: 31% tiene secundaria completa, seguido por 11% con primaria incompleta, 9% no posee ningún nivel educativo, asimismo 6% tiene nivel educativo superior completo y 9% superior incompleto.

Cabe señalar que el nivel de educación desempeña un papel crucial en la capacidad de brindar mejores condiciones para que las personas puedan obtener un salario más alto y satisfacer de mejor manera las necesidades de sus familiares.

2. CONDICIONES DE FUNCIONAMIENTO

Un estudio en San Juan de Lurigancho de 2023 arrojó que 33% se encuentran ubicadas en locales comunales de la agrupación familiar respectiva, 9% están ubicadas en vía pública y el 7% en área verde.

Esta situación ha cambiado a la fecha con la entrada del PCA, promoviendo que ninguna olla común funcione en espacio público, calle, pasaje o área verde; les han dotado de cocinas y utensilios.

3. CALIDAD DE LA ALIMENTACIÓN

La canasta entregada se redujo drásticamente. En lugar de 12 productos, muchas ollas reciben solo 4 a 6, limitando gravemente su capacidad para ofrecer alimentación adecuada.

Por ejemplo, a una olla le entregan: 200 kg de arroz, 18 litros de aceite, 32 kg de bofe o 32 kg de pollo, 40 kg de menestras (lentejas, frejol castilla o frejol canario).

Antes entregaban para el desayuno: avena, leche, aceite para frituras, fideos, atún.

Para el MIDIS, dado su enfoque de complementación alimentaria, considera dar solo 9 productos básicos que tuvieron variaciones por las compras realizadas por el gobierno; por ejemplo, sustituir leche por clara de huevo deshidratada.

En 2023, las ollas comunes con el apoyo de entidades especializadas (Centro Internacional de la Papa, etc.) llegaron a concluir que para una alimentación saludable calcularon la composición y el costo de una canasta de alimentos saludable.

4. FINANCIAMIENTO

En los primeros momentos de la pandemia, las ollas no cobraban por el menú, pues contaban con donaciones que permitían atender los almuerzos. Esta situación cambió pasada la época del COVID-19, por lo cual las ollas establecieron un precio al menú, manteniéndose gratuitas las raciones para los casos sociales.

Estos cambios se deben a los desafíos económicos y logísticos que han ido enfrentando las ollas comunes.

En la actualidad, lo que les asigna el PCA no cubre todos los ingredientes que requieren para preparar los almuerzos, por lo cual lo que perciben por los menús cubre las compras de los ingredientes e insumos que el Estado no provee.

También se han desarrollado experiencias de «recuperación de alimentos», que consiste en la separación de los productos perecibles de los mercados, para lo cual de madrugada un grupo de señoras sale para regresar con víveres para el almuerzo.

También se han dado donaciones por parte de la SUNAT, empresarios privados, etc.

También siguen haciendo ocasionalmente, cuando hay problemas de salud, polladas, picaronadas y actividades similares.

5. SIGNIFICADO DE LA OLLA PARA LOS COMENSALES

Del estudio en San Juan de Lurigancho, se obtuvieron los siguientes resultados:

Ahorro económico: La mayoría ve en la olla común una manera de obtener alimentos nutritivos, especialmente en tiempos de bajos salarios y dificultades económicas causadas por la pandemia del COVID-19.

Facilitador de oportunidades: Algunos consumidores ven la olla común como una oportunidad para «comer más saludable», así como un espacio «para socializar y estar informado».

Oportunidad para usar óptimamente el tiempo: El tiempo que no se destina a cocinar puede ser usado para estudiar, trabajar y generar ingresos para sus familias.

6. VALORIZACIÓN DEL TRABAJO NO REMUNERADO EN LAS OLLAS COMUNES

El trabajo cotidiano de las madres de las ollas comunes es invisibilizado. Es un trabajo abnegado, sacrificado, permanente e intenso, que no es reconocido ni valorizado por la sociedad.

Incluye la limpieza del local, compra de alimentos, preparación, servir el menú, dejar limpia la cocina y utensilios para nuevamente volverlos a usar al día siguiente.

En horas, son 6.70 horas en promedio por madre lo que dedican al trabajo de la olla común.

7. ORGANIZACIÓN DE LAS OLLAS

Desde su inicio, empezaron con un grupo de madres que lideraron la iniciativa hasta dar forma a sus directivas, con el nombre de Presidenta a la dirigente principal.

Se articularon en lo que se denominan redes y le dieron organicidad, logrando su reconocimiento ante la autoridad local.

Por ejemplo, en el distrito de San Juan de Lurigancho existe una Red de Ollas Comunes del distrito, la cual ha tenido capacitaciones y esta organización ha sido la gestora de sus luchas para el reconocimiento de las ollas comunes, conquistar la atención primero a través de Qali Warma y hoy vía el PCA.

En el proceso de organización de las ollas, por el lado de los municipios se promovieron otras organizaciones.

En San Juan de Lurigancho, por ejemplo, a la fecha están en la Red de Ollas Comunes de SJL un 30% y la diferencia (70%): un grupo está con el municipio y la diferencia no pertenece a ninguna organización.

A nivel de Lima Metropolitana, a partir de algunas redes distritales, se constituyó la Red de Ollas de Lima Metropolitana.

La Red de Ollas de Lima Metropolitana es una organización de tercer nivel de carácter metropolitano que cuenta con 18 redes distritales afiliadas:

  • Lima Norte: San Martín de Porres, Carabayllo, Ancón, Comas, Independencia, Puente Piedra, Santa Rosa
  • Lima Este: El Agustino, San Juan de Lurigancho, Ate y Cieneguilla
  • Lima Sur: Villa El Salvador, Villa María del Triunfo, San Juan de Miraflores, Chorrillos y Pachacámac
  • Lima Centro: El Rímac y Cercado

La Red de Ollas Comunes de Lima Metropolitana cuenta con un estimado de 719 ollas comunes afiliadas a nivel de Lima Metropolitana.

8. REGISTROS Y COBERTURA

Datos incompletos y descoordinación: A más de un año y cuatro meses de iniciada la pandemia, ni el MIDIS ni la Municipalidad de Lima habían logrado consolidar un registro completo y actualizado de ollas comunes. Muchas municipalidades no completaron la plataforma habilitada, lo que impedía monitorear si los alimentos llegaban realmente a las ollas activas o a ollas fantasma. Esto ha empezado a ser resuelto este año 2025 con la implementación del PCA.

Lima Metropolitana concentra el mayor número de ollas comunes del país. Registros oficiales y de prensa especializada las ubican por encima de 2,300–2,500 en distintos momentos recientes.

La Red de Ollas Comunes de Lima Metropolitana ha identificado unas 2,371 ollas comunes que alimentan a alrededor de 250,000 familias, lo cual se corrobora según entrevistas de El Comercio, que arroja que en Lima funcionan más de 2,300 ollas comunes, atendiendo a más de 240,000 personas.

Protección legal y transición al PCA: La Ley N.º 31458 (2022) reconoce a las ollas comunes como organizaciones sociales de base. Desde el segundo semestre de 2024, las municipalidades vienen asumiendo la distribución de alimentos como parte del Programa de Complementación Alimentaria (PCA) del MIDIS (capacitaciones, padrón y suministro); antes, esta responsabilidad estaba única y directamente en manos del MIDIS.

9. CONDICIONES OPERATIVAS Y SOCIALES

Desabastecimiento persistente: En varias ollas comunes se viene denunciando en ocasiones falta de insumos y alimentos.

Déficit nutricional y anemia infantil:

  • En 2023, según el Colegio de Nutricionistas, en Lima existen aproximadamente 2,500 ollas comunes, con el 23% de los comensales siendo menores de 5 años. Muchos comedores carecen de alimentos nutritivos, lo que expone a los niños a riesgo de anemia y desnutrición.
  • A nivel nacional, solo 4 de cada 1,000 menores con anemia logran recuperarse, lo que muestra la poca efectividad de los programas actuales.

La Defensoría recomendó ajustar la modalidad de distribución del Programa de Complementación Alimentaria (PCA) por indicios de ineficiencias y riesgos de corrupción; y un operativo de la Contraloría (14 ago. 2025) reportó baja ejecución de programas alimentarios en más de 190 municipios, con riesgos para comedores y ollas.

10. INFRAESTRUCTURA Y APOYO INSTITUCIONAL

Informes de la Defensoría del Pueblo:

Supervisión abril 2025: De 991 ollas comunes supervisadas, el 72.5% no recibió apoyo municipal para mejorar equipamiento, y el 95.4% carece de mejoras en infraestructura. También se identificó una gran proporción de adultos mayores beneficiarios (71.1%), y más del 28% son menores de 17 años. Además, dos de cada diez ollas comunes deben aportar hasta S/. 150 adicionales por ración para cubrir costos.

Informes anteriores (2021–2024): En 2021, un significativo porcentaje de municipalidades (68%) no habían entregado las canastas básicas destinadas a las ollas comunes; solo el 25% registró formalmente estas iniciativas. Muchas funcionaban en condiciones precarias, sin agua potable y sin infraestructura adecuada.

11. AVANCES RECIENTES (2024–2025)

Incorporación al PCA y financiamiento: A inicios de 2025, se informó que 1,760 ollas comunes en Lima Metropolitana (91%) obtuvieron reconocimiento como centros de atención del PCA. Esto les garantiza un presupuesto continuo —más de S/. 601 millones, con S/. 19 millones destinados específicamente a ollas comunes— así como la entrega de 4,944 kits de cocina y utensilios.

Capacitación e innovación con biohuertos:

  • Desde mayo de 2020, la Municipalidad de Lima, a través de un programa de «Biohuertos para ollas comunes», ha beneficiado a 94 ollas comunes en 11 distritos, capacitando a miles de personas en implementación de biohuertos y compostaje, generando cosechas de hortalizas para autoconsumo.
  • Otra fuente reporta que, desde ese mismo programa, se han ejecutado 179 talleres en 281 ollas comunes, beneficiando a 8,322 familias, con 1,290 biohuertos domésticos, 83 comunitarios y múltiples composteras, recuperando toneladas de residuos y transformando espacios en huertos productivos.

12. IMPACTOS POR LA INFLACIÓN Y AUMENTO DE PRECIOS

El alza en el costo de los alimentos llevó a muchas ollas comunes a reducir sus raciones o eliminar componentes nutritivos como carne o pollo, presionando aún más su funcionamiento.

La inflación y crisis económica incrementaron la dependencia de estas instancias comunitarias: se calcula que 6.8 millones de peruanos no consumen alimento durante un día o más, y se estima que Perú tiene la inseguridad alimentaria más alta de Sudamérica.

13. SITUACIÓN DE LAS OLLAS COMUNES EN DISTRITOS CON MAYOR CONCENTRACIÓN HISTÓRICA

San Juan de Lurigancho (SJL) y Villa María del Triunfo (VMT) encabezan de forma consistente los listados. Registros y reportajes previos los ubicaron en el tope metropolitano (con cientos de ollas y decenas de miles de beneficiarios); SJL y VMT aparecen como los más cargados también en los mapas georreferenciados.

Otros distritos con alta densidad: Pachacámac, San Juan de Miraflores, Carabayllo, Villa El Salvador, Comas, Ate.

Ejemplos de magnitudes históricas por distrito (referenciales):

  • VMT: 398–401 ollas; ~43 mil beneficiarios (registro/mapeo 2021)
  • SJL: 359+ ollas; ~42 mil beneficiarios (registro/mapeo 2021). (En reportes posteriores, SJL aparece aún como el distrito con más ollas)
  • Pachacámac: ~219 ollas; ~21.7 mil beneficiarios (2021)
  • San Juan de Miraflores: ~162 ollas; ~15.8 mil beneficiarios (2021)

Importante: desde 2023–2025 varios distritos han aumentado y/o depurado su padrón al migrar al PCA.

Condiciones por distrito: infraestructura, desabastecimiento y apoyo

Infraestructura y equipamiento (tendencia metropolitana): La Defensoría evidenció falta de inversión municipal en equipamiento (7 de cada 10 ollas) y carencia de mejoras en locales (9.5 de cada 10) en la última supervisión, patrón que también describe Lima Metropolitana.

Desabastecimiento focalizado: Lima Sur: denuncias recientes de no entrega de alimentos e insumos a 97 ollas y 50 organizaciones por parte de la municipalidad competente (jul.–ago. 2025). Útil como alerta para distritos como VMT, SJM, VES, Pachacámac, Lurín.

A nivel metropolitano, organizaciones y prensa reportan que las raciones no alcanzan o llegan con intermitencias, obligando a la autogestión (actividades para comprar alimentos).

Apoyo municipal y transición al PCA: 2023–2024: en Lima, el presupuesto para ollas fue asumido por la Municipalidad de Lima en etapas, mientras el MIDIS facilitó la incorporación al PCA (formación, trámites, priorizaciones en distritos como Pachacámac, Rímac, Pucusana, Lurín, SJL). Esto impacta la regularidad del abastecimiento por distrito.

14. BALANCE GENERAL PRELIMINAR

Fortalezas:

  • Avances en integración al PCA con financiamiento y kits de cocina
  • Iniciativas innovadoras de biohuertos y compostaje que promueven la autosuficiencia y sostenibilidad
  • Ley que reconoce formalmente a las ollas comunes como organizaciones sociales de base

Debilidades:

  • Falta de un registro unificado y actualizado: aún hay ollas comunes no identificadas o sin información georeferenciada
  • Desabastecimiento recurrente y suministro irregular de insumos
  • Déficits en infraestructura y equipamiento que comprometen la salud y eficiencia operativa
  • Alta carga administrativa y financiera sobre las mismas organizaciones de mujeres, muchas de ellas sin apoyos estatales claros

Datos a nivel nacional

De manera panorámica, podemos señalar lo siguiente en cuanto a deficiencias en la logística, presupuesto y gestión que se han manifestado durante los años que tienen las ollas funcionando:

La Defensoría supervisó 2,616 comedores populares y 991 ollas comunes que atienden a más de 200,000 usuarios en todo el país (Defensoría, 08/07/2025).

En el caso de ollas comunes:

  • Solo 27.5% recibió apoyo municipal para mejorar equipamiento; el 72.5% no tuvo ayuda en ese aspecto (Gestión 08/07/2025)
  • Respecto a la infraestructura, el 95.4% no recibió acciones por parte de los gobiernos locales (Defensoría, 08/07/2025)
  • En términos de población atendida: 71.1% son adultos mayores, y más del 28% son menores de 18 años
  • Al menos 2 de cada 10 ollas comunes deben cubrir adicionalmente hasta S/. 150 diarios por su cuenta para costear las raciones

En cuanto a resultados sanitarios asociados a nutrición infantil:

  • Las regiones con mayores aumentos de anemia en niños de 6 a 35 meses entre 2023 y 2024 son: Puno (76%), Loreto (62%), Apurímac (58.7%), Madre de Dios (56.3%) y Huancavelica (55.1%) (Defensoría 08/07/2025)
  • La desnutrición crónica infantil (menores de 5 años) alcanza un máximo de 24% en Huancavelica al 2024
  • Al 2024, el 72.7% de los hogares peruanos tenía deficiencias en el acceso al agua segura (fuera de redes, sin continuidad o mala cloración)

15. PRÁCTICAS RELEVANTES

A lo largo de estos 3 últimos años, también se han dado prácticas que merecen resaltarse y tomarse en cuenta para seguir mejorando la atención, apoyo y desarrollo de las ollas comunes.

a) Fortalecimiento de capacidades y seguridad alimentaria (World Vision, USAID y PMA)

Un proyecto liderado por World Vision Perú, en alianza con USAID y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), capacitó a voluntarias de ollas comunes en:

  • Preparación de menús nutritivos utilizando insumos económicos y ricos en vitaminas
  • Gestión eficiente de porciones
  • Manipulación segura de alimentos conforme a normas sanitarias

Por ejemplo, la lideresa de la olla común «Nuevo Amanecer» en San Juan de Lurigancho destacó cómo ahora priorizan verduras y menestras sobre arroz básico, logrando mayor calidad nutricional en cada plato.

b) Programa «Ollas que Desarrollan» (Alicorp + ONG Juguete Pendiente)

Esta iniciativa fortalece las ollas comunes multifacéticamente:

  • Entregas de alimentos y productos básicos: atún, pastas, aceites, entre otros
  • Equipamiento: cocinas, utensilios, balones de gas
  • Capacitación en gestión y emprendimiento: finanzas, contabilidad, nutrición, marketing
  • Apoyo a emprendedoras: producción y venta de papas rellenas o mermeladas, como fuentes de ingreso que refuerzan la sostenibilidad de sus ollas

c) Agricultura urbana y recuperación de alimentos (REDOPA + FAO)

La Red de Ollas Comunes de Pachacámac (REDOPA), con respaldo técnico de la FAO, desarrolló:

  • Cocinas mejoradas que reducen la contaminación por humo
  • Huertos comunitarios para acceso directo a hortalizas frescas
  • Gallinas ponedoras que contribuyen con proteína animal
  • Brigadas de recuperación de alimentos desde mercados y chacras, recolectando más de mil toneladas de productos que de otro modo se hubieran desperdiciado

Gracias a estas prácticas, REDOPA también impulsó ordenanzas municipales sobre recuperación de alimentos, posteriormente convertidas en políticas públicas nacionales, y fue reconocida con el Premio a la Pérdida y Desperdicio de Alimentos (PDA).

d) Iniciativas tecnológicas y sostenibles («Ollas Sostenibles»)

El proyecto Ollas Sostenibles, liderado por Oliver Ramírez, implementó una solución ambiental innovadora:

  • Instalar biodigestores que producen biogás y reducen el consumo de GLP
  • Beneficio directo a ollas comunes en distritos de Lima y Junín, alcanzando a más de 600 personas y beneficiando indirectamente a otras 2,400

e) Programas de alimentación saludable y asesoría sanitaria (Asociación UNACEM)

A través del Programa de Alimentación Saludable y Segura, la Asociación UNACEM brindó:

  • Talleres y materiales educativos sobre nutrición y seguridad alimentaria
  • Teleorientación y asesoría para ollas comunes, promoviendo prácticas saludables en zonas rurales de Pachacámac, con planes de replicación regional

f) Normativa municipal que promueve buenas prácticas

La Ordenanza Técnica N° 001-2022-PCM-SGP de Lima Metropolitana establece una serie de directrices clave para ollas comunes:

  • Registro geolocalizado actualizado
  • Capacitación nutricional en colaboración con universidades y municipalidades
  • Fomento de la autosostenibilidad
  • Recetarios saludables y monitoreo
  • Acceso a premios como el «Premio Violeta Correa»
  • Participación en el Consejo del Sistema Alimentario de Lima Metropolitana (CONSIAL)

A MODO DE CONCLUSIONES

Las ollas comunes han sido un mecanismo clave para enfrentar crisis sociales, pero no sin enfrentar múltiples barreras: desde la desorganización institucional hasta la precariedad económica y la falta de una gestión eficiente. Aunque siguen siendo esenciales para la seguridad alimentaria, requieren atención urgente y mejoras estructurales para ser sostenibles.

Sobre las buenas prácticas y experiencias:

Estas buenas prácticas reflejan cómo las ollas comunes han evolucionado desde respuestas de emergencia hacia estructuras sostenibles, empoderadas y resilientes. A través de capacitación, incubación de emprendimientos sociales, innovación medioambiental y fortalecimiento institucional, han logrado garantizar una alimentación digna y reforzar el tejido social comunitario.

Peligros

La división entre lideresas por la intromisión de autoridades puede debilitar la existencia y funcionamiento de las ollas comunes.

La presencia de entidades privadas de cooperación ha tenido un rol de apoyo a las ollas comunes desde sus momentos iniciales de organización en la pandemia. Asimismo, pueden ser barreras para el desarrollo de la organización y conciencia política autónoma de las organizaciones de ollas comunes.

Interrogantes

¿Por qué no se fusionan las ollas comunes con los comedores, en la medida de su capacidad de preparación de alimentos por infraestructura, etc.? ¿Acaso no es importante en la gestión pública la eficiencia y la eficacia del gasto, a fin de llegar a más sectores vulnerables y/o mejorar la calidad los servicios?

¿Qué hacer frente al ninguneo a los representantes de las ollas comunes y comedores populares por parte de la mayoría de Alcaldes, en los Comités de Gestión, toda vez que esta instancia tiene un rol clave en la ejecución, supervisión y control social del programa a nivel local?

¿Los problemas y vicios, por decir de alguna forma a la corrupción existente en la base y en las alturas, en los vasos de leche y comedores populares, fatalmente serán reproducidos en las versiones de ollas comunes de entregarse directamente los vales para la compra de alimentos, pues la manipulación de las Organizaciones Sociales de Base  por parte de las autoridades locales, siguen siendo el lugar común en nuestra democracia chicha, corrupta y en crisis?

ANEXO

REGISTRO DE OLLAS COMUNES EN LIMA METROPOLITANA

DISTRITOTRANSITADASBENEFICIARIOSEN PROCESOINACTIVOCANCELADOSACTIVADAS
ANCON3221681217 
ATE623475 295
BARRANCO    1 
BREÑA285 11 
CHACLACAYO13973  6 
CHORRILLOS201417 516 
CIENEGUILLA574984  12 
COMAS17011721217842
CARABAYLLO1318812 2324 
EL AGUSTINO171222  7 
INDEPENDENCIA966911  94 
JESUS MARIA      SIN REGISTROS
LA MOLINA    5 
LA VICTORIA      SIN REGISTROS
LIMA CERCADO      SIN REGISTROS
LINCE      SIN REGISTROS
LOS OLIVOS    1 
LURIGANCHO CHOSICA16110392 181614
LURIN201359  7 
MAGDALENA DEL MAR      SIN REGISTROS
MIRAFLORES      SIN REGISTROS
PACHACAMAC97     
PUCUSANA9598  7 
PUEBLO LIBRE      
PUENTE PIEDRA62446  2618
PUNTA HERMOSA127001 9 
PUNTA NEGRA151  2 
SAN BARTOLO3159   1
SAN BORJA      SIN REGISTROS
SAN ISIDRO      SIN REGISTROS
SAN JUAN DE LURIGANCHO39921274 154224 
SAN JUAN DE MIRAFLORES6232073413718
SAN LUIS      
SAN MARTIN DE PORRES211311 3162
SAN MIGUEL      SIN REGISTROS
SANTA ANITA      SIN REGISTROS
SANTA MARIA DEL MAR      SIN REGISTROS
SANTA ROSA613624 8532
SANTIAGO DE SURCO186    
SURQUILLO1116    
VILLA EL SALVADOR131360  196
VILLA MARIA DEL TRIUNFO25517960 1313820
1778104411725093188

FUENTE: MANKACHAY PERÚ – OLLITA PERÚ

CEFEL, el centro de asesoría financiera económica y laboral

Allá por las postrimerías de los años 80, me uno a un grupo de políticos,  profesionales, dirigentes obreros y estudiantes que habían constituido un Centro de Asesoría Financiero, Económico y Legal – CEFEL, un  organismo alternativo a las ONG de la pequeña burguesía liberal y del revisionismo kruschovista; no solo diferente y alternativa al reformismo por la concepción frente a la lucha reivindicativa y política de los sindicatos obreros, sino porque su forma de gestión y funcionamiento, no estaba emparentada en las típicas ong, financiadas por organismos de cooperación internacional y del socialimperialismo y sujetas a sus objetivos y concepciones.

CEFEL se asumía como un organismo generado por la lucha de clases respondiendo a los intereses, reivindicaciones y objetivos históricos de la clase obrera y sus integrantes proveníamos de la corriente marxista -leninista, de sus núcleos organizados.

Sindicatos de diversas ramas de la producción y servicios, fueron apoyados en la formulación de sus pliegos de reclamos, defensa de sus derechos laborales y sindicales, buscando que desarrollen su conciencia y movilización autónoma, como proletarios con conciencia de clase, independientemente de la clase capitalistas y patronales, que no están interesados en luchar contra la explotación de la mano de obra de los trabajadores sino únicamente entregarles migajas para aliviar su situación de esclavitud asalariada.

Su formación, trabajo y desarrollo de CEFEL se ubica antes del shock del 93 y la situación generada posteriormente, cuando el Gobierno de Fujimori emite leyes orientadas a favorecer a los capitalistas para adecuarse al nuevo contexto económico, financiero y político inspirados en las recetas del Consenso de Washington.

Ya para ese entonces se vivía en el mundo dentro de la ofensiva burguesa imperialista a raíz de la caída del muro de Berlín en noviembre de 1989, cuyas repercusiones en nuestra patria no se dejaron de sentir.

Por el lado de la intelectualidad democráticaen el país, tomaron una postura derrotista, repitiendo teorías burguesas y pequeño burguesas de los centros académicos y politicos de Europa y Norteamérica sobre la importancia y el papel de la clase obrera en el mundo presente, renunciando abiertamente a la teoría y concpeción marxista en todos sus aspectos.

Ya no era -para ellos, la fuerza productiva principal de las riquezas de la tierra, sino que pasaban a segundo plano por la presencia de los inventos y procedimiento en base a los inventos de la ciencia y tecnología, que explicaban -según ellos- la producción y el acrecentamiento de los bienes y servicios y por ende de la riqueza de la sociedad.

A renglón seguido concluían que ya no era necesario organizar a la clase obrera para la lucha de clases, ni menos aun organizar la revolución proletaria; segun ellos se trataba de profundizar, recuperar, humanizar la democracia.

En el plano sindical, la conciliación o colaboración de clases, en el plano político la concertación, la gobernanza, fueron algunos de los “nuevos” postulados de los partidos antaño de izquierda y de las entidades ligadas a ellos o cuando menos influenciadas.

Ideas, teorías y prácticas que han llevado a la situación actual del movimiento obrero y popular, es decir a la pérdida de su papel y perspectiva histórica para transformar la sociedad y su desmovilización, dispersión y blanco de la más feroz explotación y opresión capitalista e imperialista.

Promoviendo el frente único, como debe ser uno de los pilares y principios del sindicalismo clasista, asesoramos a un conjunto de sindicatos y federaciones, en la organización de su pliego de reclamos, en sus denuncias y reclamos ante el Ministerio de Trabajo por incumplimiento de pactos y convenios o vulneración de sus derechos sindicales y laborales.

En esos años del fujimorismo arreciaba el cierre de fábricas, los despidos masivos y la conculcación de los derechos laborales y sindicales y la persecución a dirigentes obreros y revolucionarios y destrucción de las organizaciones de base, con el pretexto del «terrorismo.»

Y paralelamente, leyes a favor de los capitalistas, para adecuarse a las nuevas condiciones de la pentración del gran capital, la venta o regalo de las empresas y activos del Estado.

La situación cada vez mas apremiante en cuanto a las condiciones económicas, políticas y laborales bajo la implementación del programa neoliberal del fujimorismo, probablemente, nos golpeó internamente de alguna manera, que no pudimos continuar como al comienzo.

Lo escrito no es ni un ápice de lo luchado y vivido en esa experiencia, que merece un trato mas sistemático y de todas las partes involucradas para dar cuenta de una aproximación mas completa y viva del trabajo de asesoría política y sindical de orientación proletaria marxista-leninista en la década del 90.

La madre, ¿su día?

Independientemente de alguna ideología aprendida y asumida, o tal vez en los albores de éstas[i], en algún momento empecé a no estar de acuerdo con regalar ollas o alimentos a la madre en su día, porque ello es afirmar, mejorar, reforzar su condición y rol en el hogar y la sociedad, un ser a la orden del marido y los hijos y para la sociedad.

Sin embargo, lo que piense es invisible, de peso nulo en el contexto de la sociedad moderna de consumo en la que vivimos. Pero con esa creencia me he mantenido hasta hoy.

A mi madre solía regalar un par de medias de nylon con la junta de pequeñas propinas que acumulaba.

De la escuela o el colegio eran las tarjetas elaboradas en cartulina, manualmente, como se decía, con escarcha, rosas dibujadas y mucho cariño e intención de agradar a la madre y que me diera un abrazo indescriptible de amor y ternura.

Como pocos, yo tengo (tuve) padrinos de nacimiento, de bautismo, de confirmación y de matrimonio.

Max Avencio Nuñez y Raquel Solís de Nuñez, fueron mis padrinos con quienes tuve mayor relación, afecto e influencia. Abogado él, ama de casa ella, apristas ambos para quitarse el sombrero.

En la imagen (puerta principal de la Municipalidad Distrital de Canta), yo frisaba los entre los 7 y 8 años.

Por alguna razón que desconozco viajamos en alguna oportunidad no festiva del lugar, a Canta, mi madre y mi madrina. Lindos recuerdos.   Esta foto sin fecha, pero con palabras al dorso, dicen:

Ya desde antes que tuviera uso de razón era un devoto mas del Niño Mariscal Chaperito, y que recuerde para todos los 7 de setiembre hacíamos el peregrinaje emocionado de Jauja a Canta. estas fotos son de aquellos años de devoción y ensueños.

Hace unos días estuve nuevamente por esa tierra linda, de gente amable, sencilla, generosa y sana. Por ello estas memorias a propósito de un segundo domingo más de Mayo.

Esta vez viaje con los compañeros y compañeras de trabajo, como un pequeño descanso y también abordar planes institucionales.

En mi barrio actual, luego escribiré en el grupo de wasap:

“Saludos a las madres del barrio, que la atención, cariño y reconocimiento que hoy han tenido, se prolongue siempre y cotidianamente”


[i] Mi infancia, niñez y juventud lo viví en el contexto de luchas sindicales y políticas, bajo el Gobierno Militar, la formación del SUTEP y sus repercusiones directas en la prédica y habla de maestros, estudiantes y padres de familia y de yapa mi hermana ya en la UNCP y los primeros libros de Lenin

Las organizaciones actuales, pragmáticas y de corta duración

«Las organizaciones resultan de la aplicación de la racionalidad a la actividad social humana. (…), estos sistemas sociales se caracterizan por su capacidad de unir a una motivación generalizada, una gran especificación de los comportamientos requeridos.» (Diagnóstico organizacional, Darío Rodríguez M., Ediciones Universidad Católica de Chile, 2002)

Estás ideas o está definición de organización social hay que reflexionarla en contextos determinados y para grupos sociales específicos, y que ayude a entender sus giros y sentidos de las organizaciones y quienes la promueven y conducen.
Tres décadas atrás, cuando el neoliberalismo no se había asentado completamente en la economía, la política y la sociedad, las organizaciones sociales tenían mayor consistencia y presencia en el país. El movimiento popular, el movimiento obrero, el movimiento vecinal, entre otros, podían llamarse así pues tenían existencia y norte propio.


El triunfo completo del Fujimorismo con la Constitución del 93 y las ideas del libre mercado, aunado al «salvense quien pueda», el reemplazo de las consignas del derecho al trabajo, a la vivienda, etc. por el el exitismo (individualista por excelencia) a todo nivel, el cambio del enfoque de la gestión pública como servicio a la comunidad por el enfoque del gerenciamiento , etc. ha llevado a influir en el campo popular debilitando la cohesión interna de la organización y sus comportamientos.
Actualmente, las agrupaciones familiares ( antaño asentamientos humanos) más allá de gestionar el título, los servicios, el equipamiento comunal como banderas reivindicativas ahora lo asumen como algo que se debe comprar y pagar a como de lugar, y para ellos se puede hacer de lado el trabajo común, la solidaridad o el esfuerzo comunal, se requiere solo que la gente pague la cuota, asista a la reunión y la faena a riesgo de no hacerlo y someterse a pagar la multa de 50 soles.
La racionalidad que alude el autor está presidida por el valor del dinero.
La capacidad de unir a la gente viene dado por las necesidades barriales a atender.
Hoy en día, los comportamientos de dirigentes y lideres, casi independientemente de su discurso y buenos deseos, se manifiestan en su capacidad de gestionar (léase contratar los servicios, trabar relación con autoridades y operadores políticos), antaño era tener un discurso y una propuesta por organizar, educar y movilizar por banderas reivindicativas de cambio y transformación.

En el plano barrial, frente a sus necesidades concretas: alimentación, vivienda, algun servicio básico, infraestructura urbana (escalera, muro, etc.) se activan y desactivan en lo que dura lograr el cometido o fracasar en el intento. No hay una mirada o esfuerzo por mirar el horizonte y tejer mayores relaciones que posibilite avanzar mas alla de lo cotidiano y elemental.

Finalmente, las organizaciones, de protagonistas de la movilización social y la lucha reivindicativa y política han recalado en ser instrumentos de la compra y venta de servicios y clientes de cuanto político les ofrece contratar sus servicios bajo diferentes modalidades, dependiendo la ocasión.

«…vivan los muertos que vivieron dignamente.»

El 1º de Noviembre, fui a visitar a mis padres, él en el Presbítero Maestro, ella en El Angel.

Así como la fotografía puede ayudar para el análisis de situaciones, momentos, personajes, visitar un cementerio es también una fuente de información, detalles de personajes, ciudadanos y hasta la misma tumba o lápida (o hasta su estado de conservación o descuido) te puede sugerir alguna conjetura del por que tal o cual cosa o de quien tal o cual hecho.

Aquí algunas ocurrencias (mías por supuesto).

Inmarcesible como la roca, la vida y pensamiento de Manuel Gonzáles Prada, así luce su tumba para todos que quieran visitar a nuestro primer crítico de la lacerante realidad peruana de la época contemporanea.

Constructor del Ferrocarril Central del Perú, el mas alto en el mundo (no sé si tiene ese lugar en la actualidad).

La Avenidad por la que estan tendidas sus rieles en la Capital, de Lima al Callao, también llevan su nombre.

Mausoleo majestuoso, también con su figura en alto, pareciera continuando los homenajes -después de muerto- a Felipe Santiago Salaverry. ¿Quién o quiénes habrían sido de la idea de semejante mausoleo? ¿Por qué?

Con similar idea de portento, grandeza y perennizando su nombre, éste es el mausoleo personal de José de la Riva Aguero y Osma.

Tumba de Ricardo Palma, imponente, sobria, elegante. ¿Quién no ha leido o al menos escuchado algo de sus tradiciones peruanas?

Y acá yace un homónimo de nuestro gran José María Arguedas Altamirano.

General Luis M. Sánchez Cerro en una tumba que enaltece su logro presidencial y obras, suponemos. Un jarrón (de la derecha) ¿roto?, ¿robado?, ¿perdido? y fue a causa de otro motivo, vaya uno a saber, casi casi imposible de investigar.

Luis Alberto Flores Medina, ministro de Gobierno y Policía, presidente del Consejo de Ministros, del Presidente Sánchez Cerro. Hombre poderoso y temido por tirios y troyanos. Asi luce su tumba sin su jarron, por alguna razón seguramente no amigable.

Como pocos otros casos de personajes históricos, son los amigos, correligionarios y al último sus familiares, los que le erigieron ese mausoleo personalísimo.

Tumba de Ernesto Malinowski, al igual que el recuerdo a su obra y nombre que tiene a la espalda del Ministerio de Salud, junto a otros de sus compatriotas, muestra el cuidado y dedicación en conservarlo y resaltarlos estos monumentos por la Embajada Polaca y aprecio permanente con sus conciudadanos. Todo un ejemplo en ese sentido. En esta ocasión, una ofrenda floral a uno de los padres de la ingeniería peruana.

Aqui yace José Carlos Mariátegui, «nuestra nueva luz de América», en palabras de Henri Barbusse.

Al costado yace su esposa, casi siempre imperceptible. Podría alguna `mala lengua´ decir que esta a un lado no tan visible o destacado porque el principal es el varón, el amauta, el ideólogo, ella era solo su pareja, una mujer.

«Anna Chiappe Viuda de Mariátegui (1898-1990) fue una ciudadana italiana radicada en Perú, viuda de José Carlos Mariátegui, y conocida por ser la impulsora de su obra: 

En 1975 recibió la condecoración Orden «El Sol del Perú» en el Grado de Oficial.

Fue la compañera de Mariátegui desde 1921 hasta su fallecimiento en 1930. 

Fue Directora de la Librería Minerva de Barranco y Regidora de la Municipalidad de Barranco, en Lima.»  (Fuente Wikipedia)

«El chino», pero él si de los buenos chinos. Juan Velasco Alvarado. No imaginaba que aun de muerto, personas, sencillas, comunes y corrientes, como el que escribe, lo tengamos presente y nos diéramos un tiempo de visitarlo, mirar su tumba y mostrar nuestro aprecio y admiración por su gobierno y la obra inconclusa, tarea pendiente de los peruanos dignos de hoy y mañana.

Mauselo de alguien quien en vida se apellidaba Oquendo. ¿Qué ha pasado con ese mauselo, fue por un terremoto, alguien robo, ya no tiene familiares que le recuerden ¿¿¿¿???????? Asi seguro hay cientos o miles de casos en todo sitio por inimaginables razones o causas.

No podia quedarme sin un recuerdo fotográfico de 3 de mis favoritos personajes que en vida fueron pensadores, autoridades y cuyas ideas me han desasnado y cuyas obras no deberían quedar en el olvido.

¡Vivan los muertos que viveron dignamente!

UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD

La Universidad Nacional Mayor de San Marcos desde su fundación (no recuerdo que año), ha sido crisol de ideas, teorias, investigaciones, estudios, formaciòn de profesionales buenos, de medio pelo y malos y también ha tenido y tiene una innegable proyección en la escena nacional, en todos los campos.

Por los años 90 en la Facultad de Ciencias Sociales, que yo recuerde, se dieron a conocer diversas publicaciones en forma de revista, una de ellas fue UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD.

Acá un par de números para el conocimiento de las nuevas y antiguas generaciones.

Me abstengo de opinar sobre su contenido, por esta vez o de catalogarla politicamente en tal o cual vertiente. Lo dejo para mas adelante.

Espero que disfruten de sus artículos.

https://drive.google.com/file/d/1Oa4gMMmaN_-uSBxDDPmFqTmVrBPe9Gxw/view?usp=sharing

https://drive.google.com/file/d/1bvXK-xReNA6fIH6mWbZtwPDiecw2yEJL/view?usp=sharing

La arremetida de la derecha mas recalcitrante contra la izquierda, no ha cejado en ningún instante, por el contrario, ahora preparan una nueva embestida contra el pueblo peruano

Cada año, en octubre, rememorando al gobierno del General Juan Velasco Alvarado, se encrispan las pasiones, y llama la atenciòn el odio viseral de ciertos sectores ¿oligarquicos? ¿oligarcas en ruinas?.

Sin las reformas de Velasco y las transformaciones realizadas en la economía, sociedad, educación, cultura y política, miles, SI MILES DE PERUANOS (o a la fecha millones) que hoy poblan Lima y otras grandes ciudades estarían en sus lugares de origen, a lo largo y ancho de la sierra y la costa agroexportadora.

Muchos profesionales y políticos (que solo han aprendido a terruquear) que hoy se aupan al poder -independientemente de su color, apellido, origen- estarían como sus padres, abuelos o bisabuelos, encerrados en las haciendas, bajo el látigo y el oprobio, sin la posibilidad de ascenso social y presencia en la escena nacional.

La jugada maestra de la granburguesia y el imperialismo, de hundir al Gobierno de Perú Libre en diciembre del 2022, luego hacer ascender a la primera figura y responsabilidad gubernamental a una traidora, oportunista; nos indica la capacidad de liderazgo y estrategia de la derecha encabezado por el Fujimorismo y sus aliados, para conservar el poder político y económico.

Esa derecha política supo copar al Gobierno de Castillo, un tipo finalmente inexperto, mediocre y traidor – igual que su sucesora-, y hoy Ejecutivo y Kongreso, al alimón, tienen las riendas de un país con hambre, sicariato, desorden y crisis institucional a mas no poder.

Pero su estrategia maestra, no termina aquí. Ya se ven atisbos de querer identificar como IZQUIERDA a todo lo que viene sucediendo desde Julio del 2021, para así presentarse a las próximas elecciones como una fuerza o fuerzas políticas (sus fieles aliados) limpios de polvo y paja de todo el desastre y ruina que hoy vivimos lo más de 30 millones de peruanos.

No se detendrán ante nada ni ante nadie, para desplegar su arsenal propagandístico macartista, antiperuano y patriotero, buscando lavar la mente de la gente y pretendiendo borrar de la memoria ciudadana, todos sus actos antidemocráticos, vendepatrias y asesinos, como los 70 peruanos muertos, que hoy nadie dice nada ni investigan.

No caigamos en ingenuidades de que respetarán el juego democrático o las instituciones, cuando se vean rebosados por las protestas populares o sientan peligrar su triunfo electoral. El secuestro al ex Presidente Castillo, fue «argumentado» en artimañas legales (mejor dicho ilegales) gracias al poder del dinero, las fuerzas armadas y partidos mercenarios anidados en el Kongreso, y la prensa adicta a los poderosos.

Solo la educación política, organización, unidad y lucha de los trabajadores levantando una propuesta reinvindicativa y transformadora, serán la garantía para salvar al Perú de todas las fuerzas delincuenciales que hoy azotan el pais desde el interior del Estado y fuera del Estado.

Joseph Dietzgen, José Carlos Mariátegui, José Matos Mar

El primero alemán, el segundo y tercero peruanos; J.D. autodidacta, J.C.M. autodidacta, J.M.M. académico.

Joseph nació el año 1828, José Carlos el año 1894 y José nació el año 1921. Cada uno perteneció a distintas épocas, realidades particulares y generaciones diferentes.

Dietzgen fue obrero y filósofo materialista autodidacta, Marátegui fue escritor, periodista, político y filósofo marxista autodidacta y Matos fue antropólogo​, etnólogo, investigador y catedrático.

El primero escribió sobre filosofía y economía y participó del movimiento obrero; el segundo escribió además de filosofia, sobre política, educación, cultura y desarrolló actividades partidarias; el tercero se dedicó a investigaciones sociales y actividades académicas.

En el mundo académico, intelectual y científico que se desarrolla fundamentalmente en universidades y centros de estudio e investigación, tienen sus propios cánones en cuanto al llamado quehacer científico, con sus propios formatos, standares y criterios de publicación de artículos, ensayos, investigaciones.

A ese mundo académico perteneció José Matos Mar, ahí desarrolló su vida intelectual y cultural y produjo sus investigaciones y publicaciones.

En el campo popular y socialista, que desde otra óptica bien podría catalogarse de «informal», por no estar determinado por títulos, certificados y diplomas conferidos por institución educativa y/o científica oficial, se encontraría la producción teórica y práctica de Joseph Dietzgen y José Carlos Mariátegui.

Sin embargo, particularmente nuestro Amauta, a entrado por la puerta grande al espacio académico, científico y político y no solo del Perú sino a nivel internacional. De manera análoga, para el movimiento socialista de la Europa progresista, Joseph Dietzgen está presente, a pesar de las decenas de años transcurridos.

En las universidades cuando se trabaja una tesis, hay que tener un marco teórico, exponer el enfoque en el cual sustentarás tus indagaciones y resultados, y otros aspectos de la A a la Z a tener en cuenta para llegar a tener tu grado o título, dependiendo del nivel de estudios que realizas.

Lo que quiero dejar en claro, que esta forma de conceir y practicar la investigación no es la única ni la mejor forma de producir conocimientos, como por lo general -al menos entre los jovenes estudiantes- podrían escuchar, pensar y asumir en su vida futura.

No todo artículo, libro, producción científica, valedera, verdadera, «objetiva», tiene que estar marcada por los parámetros de entidades de producción académica dominantes. Por ejemplo, el libro más conocido y leido de Matos Mar «Crisis del Estado y desborde popular», con varias ediciones, no se precia precisamente por mostrar su marco teórico, sus hipótesis, las citas de un o mil autores a lo largo de sus páginas, etc., etc. lo cual no lo hace de menor calidad y validez científica a cualquier otra producción ajustada a esos elementos preestablecidos por la academia.

Otro tanto podemos afirmar sin tapujos de la basta y trascendental producción de Mariátegui.

Alguna vez escuché en las aulas universitarias, -algo incómodo para mi- que una aseveración, por demás evidente, trivial (para quienes conocemos medianamente el mundo urbano popular) como ello de que la gente invade los cerros o compra sus lotes en esa zona periférica y riesgosa del territorio de una ciudad como Lima, es por falta de recursos económicos para hacerlo en otra parte urbanizada de a gran urbe, como una de sus fundamentales causas, y que para escribirlo, afirmarlo tal cual tendría que poner la referencia, el autor que sustenta dicho fenómeno.

Leamos a José Carlos Mariátegui, a Joseph Dietzgen y como ellos también a decenas de autodidactas en la literatura latinoamericana y mundial, que no tuvieron que estudiar en la Universidad para pensar y crear, para escribir y proponer soluciones al status quo sobre bases sólidas, concretas y reales o ser expresiones importantes de la cultura popular, asi como para no tener que ponernos camisas de fuerzas, para investigar, conocer y trabajar por hallazgos, inquietudes intelectuales y prácticas o aportes para adentrarnos a trabajar en ese sentido.

Investigar, claro que si, poniendo en juego nuestro enfoque o enfoques, o teoría o teorías, modos de ver las cosas, utilizando una metodología o complementando varias, siendo pulcros y éticos en el proceso de producir alguna manifestación escrita de tal o cual problema o fenómeno que estamos interesados o nos concita estudiarlo para saber el cómo, dónde, por qué y para qué.

No perder la coherencia, amplitud, creatividad y consecuencia en todo estos procesos, y así podremos contribuir a conocer para transformar.

«Carlos Marx hizo una mencion elogiosa de las ideas económicas de mi padre en el prefacio a la segunda edición del primer tomo de El Capital; también lo visitó en Siegburg.«

«En su opúsculo de gran interés Ludwig Feurbach y el fin de la filosofía clásica alemana, Federico Engels explica la esencia de la dialéctica y agrega: «Y esta dialéctica materialista que desde años era nuestro mejor instrumento de trabajo y nuestra arma mas afiliada, fue, cosa sorprendente, descubierta no sólo por nosotros, sino además, independientemente de nosotros e incluso de Hegel, por un obrero alemán, Joseph Dietzgen.»»

Eugen Dietzgen1

  1. LA ESENCIA DEL TRABAJO INTELECTUAL Y OTROS ESCRITOS, Joseph Dietzgen, Editorial Grijalbo, S.A., México, D.F., 1975 ↩︎

El ejercicio de algunas profesiones en la sociedad actual como un negocio y a veces de la forma más despreciable

Hace un año la gata Isaura de nuestra familia enfermó, con 16 años de vida. Mi hijo eligió una veterinaria especializada, segun decia su publicidad.

Después de los análisis de ley, necesarios y urgentes, el pronóstico de la profesional no indicaba para nada que no tenía mas futuro el pequeño animal; al contrario daba esperanzas, pero esperanzas basadas en el aire, pero tampoco en eso, sino en el afán de hacerse de ingresos vía tal y cual análisis al animal viejisimo, enfermo y sin fuerzas para nada.

Ingresos a costa de la desolación de un joven que busca solución para su mascota y confia en un «profesional».

No se espera recibir una respuesta que no se ajuste a la verdad de la situación que atravieza la mascota, sino la verdad tal y como se evidencia de su estado de salud y de los resultados de los análisis practicados.

Frente a la nula recuperación de la postración y dolores que sufre la gata, la veterinaria señala que la gata no da para mas, en menos de 4 días y hay que hacerla dormir. Resignados aceptamos ese desenlace, pero para lo cual nos cobra 100 soles más para aplicarle la sustancia que cejará con su vida de la mascota.

¿Cómo no decir de buenas a primeras que la mascota no tiene futuro, por la edad avanzada, por los sintomas que tiene y por las enfermades que producen dichos dolores y sufrimientos a la gata? Claro teniendo en manos los primeros análisis. Esperan practicar o jugar con la vida del animal y las expectativas del cliente, y asi hacerse de unos soles mas.

Hoy se fue Milo, mi otra mascota. Ocho años acompañándonos a nosotros los humanos, alegrando muchos momentos de los integrantes de la familia.

Al parecer su enfermedad ya iba desarrollandose lenta pero perniciosamente. Erliquia. Las dos primeras veterinarias hicieron lo que pudieron, pero no lo hicieron con todo el arsenal médico y cientifico básico para estos casos; pues no llegaron a determinar que era la erliquia y hacian lo que podían frente a la genéricamante llamada hemoparasitosis, mientras seguía consumiéndose la salud y vida de mi perrito.

Fue el tercer veterinario quien llegó a determinar la causa profunda de su enfermedad y los síntomas, dolores y problemas que lo tenian postrado ya hace mas de 10 días, cuando después de vomitar una madrugada ya no pudo levantarse al día siguiente y caminar y hacer todas sus actividades cotidianas.

A diferencia de la experiencia con mi gata, que caimos en manos de viles mercaderes con la salud y vida de las mascotas, en esta oportunidad llegamos a dos veterinarias del barrio que no avanzaron de la generalidad del diagnóstico y tratamiento y cuando llegamos al tercer profesional en animales, la salud del can, estaba ya completa e irreversiblemente deteriorada.

Cuarentiocho horas de internamiento, y no pudo superar los problemas renales, neurológicos y digestivos.

En esta última oportunidad, el médico veterinario procuró los análisis pertinentes y con la verdad por delante, fue alcanzandonos los resultados y la evolución del paciente canino, nada positivos. Y en cuanto a costos, no cobró mas alla de las tarifas standar y menos se aprovechó de las circunstancias. Todo un caballero, para un gran perro como fue Milo, R.I.P.

100 años con etapas, zigzageos y retrocesos

Recuerdo dimes y diretes de si el APRA es de izquierda, izquierda democrática o es de derecha junto con el antaño Acción Popular y Partido Popular Cristiano, allá por los años 70 y 80.

Lo cierto es que ya ese partido de la estrella no era mas la encarnación de «El antimperialismo y el APRA», peor aun cuando muere su lider y fundador.

Algunos años mas adelante se hizo del gobierno, no una sino dos veces, oportunidades estas para materializar, llevar a cabo su programa a la luz de su ideología indoamericana.

Lo hizo a su manera, claro esta, manera que llevaba como políticas públicas otros intereses muy diferentes y hasta casi opuestos del APRA «original»; es más hizo de gonfalero y alumno aplicado del neoliberalismo, en boga.

En esto ha sido y es, al unísono de sus similes socialdemócratas de América Latina y Europa, que mayoritariamente se convirtieron en los porta estandartes del capitalismo, con rostro humano, dicen todavía.

Este año cumple 100 el partido mas viejo y organizado del Perú y que tuvo un arrastre de masas populares, suficiente como para plantearse de verdad, hacer una revolución.

A la ascensión del fujimorismo, pactaron en silencio cuidarse las espaldas; pareciera que tal acuerdo aun sigue en pie, no se por qué intereses o precauciones, pero ninguna de ellas a favor de los intereses populares y nacionales.

100 años a veces es solo un número.